Cómo retrasar el envejecimiento

Te contamos qué es, qué terapias funcionan y qué no.

El envejecimiento es inevitable, el paso del tiempo, el sol, la alimentación, contaminación, etc hacen que nuestra piel se resienta. Aunque no sabemos bien como detenerlo, sí que somos expertos en acelerarlo.

El envejecimiento se produce por el estrés oxidativo que sufren las células del organismo. Cuando se llevan unos malos hábitos, mala alimentación o se consume alcohol, nuestro cuerpo no es capaz de reparar por sí mismo el daño celular que provoca los radicales libres.

Desde luego, el tabaco se lleva el premio en las causas de envejecimiento prematuro. La exposición excesiva al sol hace que las células de la piel envejezcan antes. El estrés crónico, una dieta alta en azúcares y grasas inflamatorias, la falta de sueño, el sedentarismo, todo lo que comúnmente se conoce como "no cuidarse" hace que nuestros cuerpos y, sobre todo, mentes envejezcan antes.

Para prevenir y retrasar el envejecimiento es fundamentar seguir una alimentación saludable, realizar ejercicio físico y controlar el estrés.

Te damos 5 claves fundamentales para retrasarlo:

1. Haz ejercicio físico de forma regular. Hay que mantenerse activo, al menos 30 minutos diarios. El ejercicio no es sólo bueno para retrasar el envejecimiento, también te dará una enorme lista de beneficios, como reducir el colesterol, combatir la diabetes, limpiar la sangre… etc.

2. Consumir alimentos antioxidantes. Se recomienda tener una alimentación rica en frutas y verduras, ya que tiene un alto poder antioxidante. El té verde, los frutos secos o las hojas verdes tienen unas grandes dosis de vitamina C y E (principal antioxidante liposoluble del organismo) además de polifenoles.

3. Tomar vitaminas antienvejecimiento. O bien mediante la alimentación que te hemos comentado, o con suplementos alimenticios. Estos serían: betacarotenos, vitaminas A, C, K y E, vitaminas del grupo B, como la B12 y la D3.

4. Consumir grasas insaturadas con una dieta rica en Omega3 y Omega6. Estos componentes los podemos encontrar en aceites de semilla, hojas verdes, etc.

5. Reducir la ingesta calórica. Si queremos reducir el estrés oxidativo de nuestra células, hay que compensar las calorías que consumimos con las que gastamos. Además, reducir el consumo de calorías ayuda a prevenir muchas enfermedades relacionadas con la edad, incluso el cáncer.

También te damos otros tips que ayudan a no acelerar el envejecimiento:

- Evitar emociones negativas: pocas veces tenemos en cuenta las consecuencias de las emociones en nuestro cuerpo. Pero lo cierto, es que si son habituales pueden provocar un deterioro en el organismo.

- Descansa: Es necesario descansar lo suficiente para que el cuerpo se recupere. Con el paso de los años el sueño se ve alterado y tendemos a dormir menos, lo que hace que no le demos tiempo a las células para recuperarse.

- Aprende a respirar: respirar de manera correcta aumenta nuestra calidad y esperanza de vida, ya que hace llegar el oxígeno a cada célula de nuestro cuerpo y así evitar la oxidación. Debemos respirar de manera amplia y profunda, conseguiremos ser personas más felices y vivir de manera más relajada.

- Beber agua: Este tip tiene más importancia de lo que creemos. El envejecimiento está relacionado con una deshidratación progresiva del organismo. Además ayuda a eliminar toxinas.

- Evita el estrés: El estrés es el enemigo de la juventud. Provoca una oxidación gradual del organismo que repercute en un desequilibrio de órganos. Debemos mantener el estrés a raya si queremos mantener nuestra salud.

- Protección solar: es muy importante proteger nuestra piel del sol durante todo el año, no solo los meses de verano.

 

Aparte de estos tips imprescindibles, las terapias anti-aging son el último grito en salud. Podemos encontrar hasta hormonas antioxidantes y procedimientos que suelen ser costosos y poco efectivos. Analizamos las terapias o mitos más famosos, y si realmente funcionan:

TERAPIAS HORMONALES

La testosterona, la hormona del crecimiento, estrógenos y melatonina se venden como la fuente de la eterna juventud. Pero… ¿realmente funcionan?

En general, todas estas hormonas tienden a descender sus niveles provocándonos más grasa, menos libido, menos densidad ósea... Sin embargo, si empezamos a tomar estrógenos para paliar estos síntomas y el consecuente envejecimiento, podemos aumentar el riesgo de cáncer de mama. Otros suplementos, mejoran la baja testosterona y estrógenos pero otros no producen ningún efecto significativo.

ANTIOXIDANTES

Como te hemos dicho anteriormente, es importante consumir elementos antioxidantes o vitaminas. Sin embargo, estos antioxidantes funcionan sólo si nos faltan. Si nos faltan antioxidantes el envejecimiento se acelerará, por lo que es importante consumirlos. Sin embargo, no hay pruebas que tomando un montón adicional se retrase el envejecimiento, en el caso de que no nos falte. En general, se puede decir que la falta de antioxidantes te envejece más, pero ningún antioxidante funciona para detener el envejecimiento.

RESTRICCION CALÓRICA

Funciona a veces. La restricción calórica sí mejora la esperanza de vida de las personas que sufren de obesidad o sobrepeso, pero no se ha comprobado que las personas sanas y delgadas vivan más. Sí que se ha comprobado que estrategias como el ayuno intermitente son efectivas y más duraderas.

LEVANTAR PESAS

Por el momento, esta parece ser la única receta contra el envejecimiento que funciona de verdad. Los genes que se activan con el ejercicio, intenso son los que se desactivan con la edad. El ejercicio corrige el declive de los músculos asociados con la edad. A partir de los 30 años las personas que no hacen ejercicio pierden entre un 3 y un 5% de músculo cada diez años. Las consecuencias son bastante malas: mayor riesgo de osteoporosis y fracturas, metabolismo reducido, mayor acumulación de grasa, y por tanto, mayor riesgo de diabetes y enfermedades cardiovasculares.